Monotemático de "El Señor de los Anillos"

No sé cuantos conoceréis lo que son los LCG, si no es así, os lo voy a intentar explicar aquí.

Los LCG son juegos de cartas concebidos por la mente enferma de un fenicio que se dio cuenta en Estados Unidos hace cosa de 2-3 años de que  hay un nicho de mercado entre los jugadores de tablero-cartas que no está dispuesto a tragar con los CCG (o juegos de cartas coleccionables, del tipo "Magic"), teniendo que pagar entre 5 y 7 euros por un sobre de cartas en el que no sabes qué te va a "tocar".
Entonces en su afán de vender, susodicho fenicio presento el negocio: LCG; un modo de asegurar que todo el mundo compre durante la vida del juego todo lo que editas, pero sabiendo lo que compra, esto es, todos los meses sacando mazos de cartas definidos y cada cierto tiempo expansiones mayores con más cartas y a mayor precio.

Bueno, pues si eso no ha quedado claro, te compras la caja básica, después las expansiones que quieras, sabiendo lo que llevan dentro, y a jugar. Las expansiones son más caras (un mazo de 60 cartas cuesta unos 13-15 euros, pero con todas sus copias repetidas el máximo de veces que se pueden incluir en el mazo de juego, es decir, que en 60 cartas puedes tener 20 diferentes), y de vez en cuando una expansión "deluxe" por unos veintitantos euros.

Así que ayer, día 1 de Junio, aprovechando que algunos de la sociedad Southerland Highlanders teníamos la tarde libre, ahí que nos juntamos a eso de las 6:30 para jugar a uno de los LCG que más nos gusta "El Señor de los Anillos.
Enganchamos por banda la expansión "deluxe" de Minas Moria e intentamos jugar las 3 aventuras que se incluyen en la caja.
La primera la jugamos 2 veces, pudiendo entrar en las minas la segunda vez. Nos costó un montón ya que  no  conseguimos hacer que el único mazo capaz de moverse rápido por las habitaciones no conseguía arrancar, pero pudimos defendernos bien ya que 2 mazos de guerrero, uno enano y otro elfo hacían las delicias cada vez que aparecía un trasgo, orco o  "bicho" de cualquier otro tipo.
Dentro de Minas Moria, la segunda aventura era la más sencilla, defendiendo la sala del trono del Rey Enano, y con cartas suficientes como para que los trastos ni se acercaran a tocarnos, fue casi casi un paseo bastante rápido.
La salida de las minas ya fue otro cantar, se jugó 2 veces y no conseguimos salir de ahí con vida. No corríamos lo suficiente para dejar atrás a los orcos que nos seguían, y la carta del terror oscuro o algo similar, no hacía precisamente favores al avance.

Después de jugar este agobiante viaje de carreras y batallas en "La Mina del Enano", intentamos subir el Caradhras (al más puro estilo del libro de J.R.R Tolkien, pero con Arwen Undómiel de acompañante), lo cual se presentó como la partida más larga de la tarde-noche (sisi, la cosa terminó muy tarde, incluso hicimos parada para cenar) comenzando sobre las 12:30-1:00 de la noche y terminando a las 3:15 de la mañana.

Cartas, Tapetes, Tokens, Tiles, Marcadores de conteo listos y jugando.

Cartas, Tapetes, Tokens, Tiles, Marcadores y ALGUNA MANAZA!!

Resumiendo, y si por si quereis mi opinión sobre el juego, es un juego REALMENTE temático, si entras en Moria tienes prisa por pasar por la mina del enano, llegando a las habitaciones interiores tras los pasillos e intentando salir lo más rápido posible por puentes, pasillos y salas derruidas mientras la oscuridad aterradora va creciendo en la mina; si te enfrentas a la subida del Cradhras te encontraras con picos de montañas y más picos en los que soplan corrientes gélidas de viento que congelarán a tus héroes, haciendo que estos no puedan correr, y enfrentando a ventiscas y tormentas tan duras que la subida se hace eterna (y no solo en sensación, sino que la partida se eternizaba) y tan dura como a Juanito Oiarzabal cualquiera de sus cumbres.
No dudéis en probarlo con distintas aventuras, si tenéis (y existe) seleccionar la parte del libro o de las películas que más os guste e intentar hacerle frente.
MORDOR NO DEBE ALZARSE!!!


Gracias Perdicas por las fotografías!